Originarios de Suecia, los rollos de canela son muy populares en los Estados Unidos y en todo el norte de Europa.
Los suecos, acostumbrados a compartir un momento por la tarde con un café acompañado de un rollo de canela, popularizaron su consumo y ahora se puede encontrar en muchas cafeterías.
No te resistirás a probarlo en un batido o en un té de burbujas con leche. Sus sabores reconfortantes también van bien en cócteles, especialmente con licores marrones y productos a base de manzana como la sidra o el Calvados.